jueves, 9 de octubre de 2014

DEP Excalibur

Hoy se ha cometido un asesinato en mi país. Un asesinato sin sentido a sangre fría. Esta tarde han acabado con la vida de Excalibur, el perro de la enfermera infectada de ébola. Sin cuarentena, sin pruebas, sin conocimiento, sin el consentimiento de sus dueños. Con fuerza bruta, con violencia. Con miedo. 

Como si fuera poco tormento el que esta familia está sufriendo, unos ignorantes cobardes han decidido romperla. Aunque la enfermera se recupere, aunque su marido no esté contagiado, su familia ya nunca volverá a estar completa y su vida nunca volverá a ser igual. Pero qué más dará, gracias a nuestros competentes políticos hemos esquivado esa bala, ya podemos dormir tranquilos estando protegidos por esa gente tan capaz que vela por nuestros intereses por encima de los suyos propios.

Piénsalo por un momento. Que te puedan arrebatar lo que más quieres en esta vida con tanta facilidad no hace más que añadir otra gota a este vaso de impotencia que ya lleva tiempo derramándose por los bordes. Había otras soluciones, ¿por qué no aferrarse a ellas? ¿Por qué no se han detenido a pensar en ello un momento? ¿Por qué no darle una oportunidad a este perro? ¿O dársela a la ciencia, como solicitaba el experto en esta enfermedad? ¿Por qué tomar la vía rápida cuando no se tomó desde el principio? ¿Por qué elegir como cabeza de turco al que menos culpa tiene y al que no se puede defender? ¿Por qué acabar con la vida de Excalibur completamente solo, lejos de sus seres queridos, mientras sufren en la distancia? Todo este drama terrible es escandaloso, horrible. Y huele muy mal. No sabemos si el perro estaba enfermo y ya no lo sabremos nunca. Seguridad sanitaria los cojones, aquí de lo que se trata es de aparentar que se hace algo mientras escondemos el miedo detrás de una careta de profesionalidad con las gomas rancias. Pero mañana será otro día, otro estupendo día para darnos a conocer en todo el mundo por lo estrepitosamente dantescoas que sabemos hacer las cosas en España.

Al final siempre pagan los más inocentes. Y es que si el gobierno trata a las personas como a perros, ¿cómo esperabais que fueran a tratar a un perro? 

Hoy se ha cometido un asesinato en mi país. Descansa en paz, pequeño.

1 comentario:

  1. Me remito a mi comentario en facebook.

    Han asesinado a un pobre e indefenso perro. Lejos de sus dueños, sin poderlos ver por última vez. Sin percibir su olor antes de dormirse. Si es que lo durmieron, porque personalmente lo dudo mucho.

    Leo en periódicos que no nos manifestamos por los dos religiosos, que no lo hacemos por los africanos. Prensa amarilla, lo de siempre.
    Quizás es que a los religiosos sí se les dio una oportunidad, no como a muchos españoles enfermos repartidos por el mundo. Quizás porque, por desgracia, poco podemos hacer desde nuestra casa por las pobres gentes africanas.

    Pero es que esto ha pasado en casa y en el siglo XXI. Han matado a un ser vivo sin tener ninguna prueba. Solo una acusación. Haber estado en contacto con una enferma. ¡A la hoguera!

    Y esto es lo que indigna a la gente. Que seamos un país de incultos que no es capaz de confiar en la ciencia para verificar y estudiar cosas antes de tomar decisiones.

    ¿O se hizo para disimular que el gobierno hace algo? Eso ya lo dije en mi muro. Enseñar músculo y demostrar que harás lo necesario por proteger a los ciudadanos...
    ¿De verdad?

    ResponderEliminar