Okinawa estuvo mucho tiempo bajo la influencia de China, y todo lo que venía de allí se consideraba atractivo e elegante, así que lo más probable es que kara corresponda al carácter que significa "china" y no a "vacía", aunque, como digo, sólo se trata de una mera suposición.Los dos tipos de te que se enseñan y practican actualmente en Okinawa deberían llamarse, de forma más correcta, Shuri-te y Naha-te, las dos escuelas distintas de kárate de la isla. De todas formas, los caracteres correspondientes a "Mano China" alcanzaron mayor popularidad y quizá, como resultado de esto, la gente de comenzó a creer que el kárate era una forma de boxeo chino. Todavía existen personas que opinan así, pero, de hecho, el kárate que se practica hoy en día es muy distinto del antiguo arte de Boxeo Chino.Por esta razón, no creo que el término "Mano China" sea el correcto para nombrar el kárate de Okinawa tal como ha evolucionado durante siglos. Pocos años después de mi llegada a Tokio tuve la oportunidad de expresar mi desacuerdo con esa forma de escritura tradicional. Cuando la Universidad de Keio formó un grupo de investigación sobre kárate, sugerí un nuevo nombre: Dai Nippon Kempo Karate-dô (textualmente: Gran Japón Puño-Método Vacías Manos Camino), utilizando el carácter kara en el sentido de "vacío" y no de"china". Al principio la sugerencia provocó violentas críticas, tanto en Tokio como en Okinawa, pero confío que este cambio que propugno desde hace años será aceptado.Karate-dô, mi camino (Gichin Funakoshi, 1956)
Llevo unos días leyendo este libro, escrito por el que sería conocido como el fundador de la escuela Shotokan (aunque él mismo indica en el libro que se opone firmemente a ese intento de diferenciación por escuelas). A pesar de que el corrector de la editorial debía de estar de vacaciones y pusieron en su lugar a un mono oligofrénico, estoy disfrutando mucho de la lectura. El hecho de que el kárate fuera un deporte que se practicaba clandestinamente en sus inicios ha dado lugar a que apenas existan datos fácticos documentados de cómo se originó este arte, así que la mínima historia que llega a nuestras manos es de agradecer.
Ahora, luego llegas a pasajes como este de aquí arriba y no sé si va en serio o el maestro ya chocheaba, porque si me tienen que poner en el cinturón todos los caracteres japoneses de ese nombre y en lugar de darme un par de vueltas con él, me tendría que dar siete. Aunque el pobre, con eso de la terminología, no terminaba de acertar.
Otro trabajo al que dediqué mi atención fue la reforma de la terminología. Poco después de llegar a Tokio, en 1922, la editorial Bukyosha publicó un libro que había escrito, titulado: Ryûkyû Kempo: Karate. En aquel tiempo el carácter kara se escribía todavía en su acepción de "china" y casi todos los nombres de los katas que describo en mi libro tenían su origen en Okinawa: Pinan, Naifanchi, Chinto, Bassai, Seishan, Jitte, Jion, Sanchin, etc. De hecho, esos eran los nombres que había aprendido de mis maestros hacía mucho tiempo.Nadie, entonces, sabía de dónde habían surgido, y la gente tenía dificultes para aprenderlos. Así que, después de haber convertido "Manos Chinas" en "Manos Vacías", comencé a denominar los katas con nombres que resultaban más fáciles para los japoneses y que hoy día son familiares en todo el mundo: Ten no kata, Chin no kata, Hito no kata, Empi, Gankaku, Hangetsu, Meikyô, Hakkô, Kiun, Shôtô, Shôin, Hotaku, Shôkyô... Me apresuro a segurar al lector que no pienso que los nombres que he escogido vayan a ser eternos. No dudo que en el futuro, con el cambio de los tiempos, los nombres de los katas también cambiarán. Y así debe ser.
Sobra decir que no. Lo mismo es porque yo soy de otra escuela, pero salvo un par de estos últimos, del resto... ni idea. Aunque tampoco entiendo muy bien qué tiene que ver cambiar el nombre del kata para que el kata en sí sea más fácil de aprender. Quizá si empiezo a llamar "Mi gato se llama Guantes" a Suparimpei me lo llegue a aprender un día de estos.
Ea, sed buenos.
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