Dieciocho Expocómics ya. Se le llena la boca a una diciéndolo, y casi, casi hasta me salen arrugas. Hemos crecido con este Salón y, como él, muchos nos estamos haciendo mayores. Demasiados años entre stands utilizando diferentes ojos mientras sientes que el tufillo a rancio empieza a asomar entre nostalgia, páginas amarillentas, inadaptados sociales y juventud. Pero al final siempre queda ese reducto de gente que, edición tras edición, no falla y es tranquilizador pensar que está ahí para recordarte tiempos mejores.
O quizá es que me he hecho mayor y punto. |
Escribiría algo más, pero no me quisieron acreditar, así que... ¡au!
No hay comentarios:
Publicar un comentario